Más de 81 millones de personas conviven con esta enfermedad en la región
MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
Más de 81 millones de personas conviven con una enfermedad respiratoria crónica (ERC) en Europa, un conjunto de patologías que han sido ignoradas históricamente y sobre las que aún persisten retos de infradiagnóstico, mala gestión y carga relacionada, según advierte un informe elaborado por la Organización Mundial de la Salud para Europa (OMS/Europa) y la Sociedad Respiratoria Europea.
Las enfermedades respiratorias crónicas incluyen patologías como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y el asma, que son con frecuencia prevenibles y manejables. Sin embargo, siguen siendo una de las principales causas de muerte, discapacidad y desigualdad en la Región Europea de la OMS, por lo que el organismo internacional urge a actuar en el primer informe que realiza de este tipo.
"La carga es desigual entre los países de la Región y dentro de ellos. Las poblaciones vulnerables soportan el mayor peso con un limitado a tratamientos esenciales. La magnitud de la ERC se ha pasado por alto, ya que la enfermedad ha recibido una atención política limitada y una financiación insuficiente en las últimas décadas, lo que ha dado lugar a diagnósticos insuficientes y erróneos, datos fragmentados e investigación limitada", ha señalado el director regional de la OMS/Europa, Hans Henri P. Kluge.
La EPOC y el asma representan la mayoría de los casos de ERC en la Región, y la EPOC es responsable del 80 por ciento de las muertes relacionadas con esta enfermedad. Las proyecciones futuras indican que los casos de EPOC aumentarán un 23 por ciento en el mundo entre 2020 y 2050, con los mayores incrementos entre las mujeres y en los países de ingresos bajos y medianos. Las hospitalizaciones y las muertes por asma también siguen siendo elevadas, especialmente entre los jóvenes.
La pérdida de productividad regional entre los 30 y los 74 años debida a las ERC se estima en 20.700 millones de dólares. En la Región, las disparidades son evidentes, con una alta prevalencia de las ERC en la parte occidental, pero altas tasas de hospitalización y mortalidad en la parte oriental.
Aunque los avances que se han producido en las últimas décadas han ayudado a disminuir la mortalidad por ERC, el informe destaca que este éxito ha conllevado una reducción de la financiación para la investigación y un debilitamiento de la vigilancia. En la actualidad, las ERC son la sexta causa de muerte en la región, con cerca de 400.000 muertes al año como consecuencia de las mismas.
FACTORES DE RIESGO: TABACO Y CONTAMINACIÓN 6y5v1j
Además, el informe alerta de un aumento de la incidencia de estas patologías, con 6,8 millones de nuevos diagnósticos cada año. El consumo de tabaco y la exposición al aire contaminado en interiores y exteriores son los principales factores de riesgo de este auge.
El tabaco sigue siendo la causa más evitable de enfermedades respiratorias en la Región, donde el 25,3 por ciento de los adultos fuma, muy por encima de la media mundia, 20,9 por ciento. Asimismo, los nuevos productos derivados, como los cigarrillos electrónicos y el tabaco calentado, populares entre los jóvenes, también aumentan los riesgos para la salud, que pueden ser permanentes, incluyendo daño pulmonar.
Al mismo tiempo, más del 90 por ciento de los habitantes de la Región respiran aire contaminado con niveles peligrosos de partículas, muy por encima de las directrices de seguridad de la OMS.
"Respiramos 22 000 veces al día, pero la salud respiratoria sigue siendo una de las áreas más desatendidas de la salud mundial. Las enfermedades respiratorias crónicas son una causa importante y poco reconocida de muerte y discapacidad, y exigen una acción colectiva urgente. Este informe es un primer paso vital hacia el cambio. Es hora de cambiar la mentalidad y convertir la salud respiratoria en una prioridad política en toda la región", ha aseverado la presidenta de la Sociedad Respiratoria Europea, Silke Ryan.
Con todo ello, la OMS/Europa insta a los gobiernos, la sociedad civil y la comunidad sanitaria a priorizar las ERC como parte de estrategias más amplias contra las enfermedades no transmisibles (ENT), a fin de conseguir un mejor abordaje y más equitativo de estas enfermedades para 2050.
Entre las líneas de actuación que recoge el documento, destaca la integración de la atención a las enfermedades cardiovasculares en la cobertura sanitaria universal; mejoras en prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y cuidados paliativos; invertir en Atención Primaria y en su capacidad de diagnóstico para mejorar la prevención y la detección precoz; una financiación sostenida para impulsar la investigación y la innovación; colaboración interregional; y aprovechar el potencias de las herramientas de salud digital y la inteligencia artificial (IA).